Inspirando, espirando, todos los pasos de Anapanasati se convierten en uno. Calmando cuerpo y mente, simplemente estoy alerta a lo que viene y se va: dolor en la espalda, picor en el brazo, pensamientos, desconcentración, tranquilidad. No hay más meditación que esta.
martes, 4 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario